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El Grupo riojano Bodegas Olarra que desde 1973 elabora vinos en La Rioja Alta, ya os hablamos en otra ocasión de su vino Añares 2010 , ha adaptado en el suelo manchego de Yepes - Toledo-  un tipo de bodega en el que te encuentras muy a gusto como en casa.

Bodegas y Viñedos Casa del Valle de la DO Vino de la Tierra de Castilla es un espacio con patios manchegos con tejas centenarias, jardines entre los que se mezclan olivos, lavandas y vides.  En el que os recomiendo ir un día de sol por su espectacular vista.

Además de Vinos Casa del Valle elabora aceite de Oliva Virgen Extra de olivos centenarios de aceitunas Picual, Cornicabra y Arberquina de sabor intenso y dulce paladar.

En su viñedo a modo de "Chateaux" encontramos las uvas  Sauvignon Blanc, Cabernet Sauvignon, Merlot y Syrah. Se nota que quieren elaborar vinos distintos mimando la cepa, centrándose al terruño manchego de la zona, consiguiendo así Vinos de Pago, es decir, vinos exclusivos con un microclima particular y una composición del terreno específica que la diferencian y distinguen de otras zonas de su entorno.

José Fuentes, responsable de enoturismo y un chico encantador, nos explicó todos los detalles de las cepas de Casa del Valle. Su explicación de lo más amena fue muy ilustrativa. Me gustó su forma de enseñar y de una forma sencilla y divertida hacernos comprender términos vinícolas que ya había escuchado pero no conseguía entender con claridad.

Su Bodega es coqueta,  algo pequeña pero muy funcional. Dividida en tres salas, donde sacar el mejor rendimiento y elaboración de buenos vinos.

Algo curioso y que no hacen muchas bodegas es darte a probar el vino cuando es mosto fermentado, José nos ofreció esa posibilidad y es muy curioso, dulce y alcohólico os animo a probarlo si tenéis ocasión de ir a la bodega cuando están elaborando los vinos en los depósitos.

Además de la Bodega tienen dos estancias más una para catas y otra muy exclusiva ideal para celebrar bodas o comidas de empresas donde dejarte envolver de la gastronomía manchega y de sus excelentes vinos.

Os recomiendo también hacer una cata en Casa del Valle ya que no solo catas sus vinos sino que también aprendes a percibir los aromas del vino.

En cuanto a sus vinos que probamos:

Hacienda Casa del Valle Sauvignon Blanc -- 5,58€ botella
Varietal tiene un bonito color amarillo pálido, intenso en aromas de fruta tropical, en boca equilibrado y untuoso.

Hacienda Casa del Valle Cabernet Sauvignon 2010 -- 5,58€ botella
Varietal de color intenso con capa alta, aroma a violetas y ahumados. En boca es amplio. Estuvo 6 meses en barrica nueva de roble.

Hacienda Casa del Valle Shyrah 2010 -- 5,58€ botella
Vino varietal de color picota oscura con capa alta, aromas a pimienta y fruta confitada. En boca goloso y corpulento con retronasal a café. Estuvo 6 meses en barrica nueva de roble.

Finca Valdeagua 2009 --  9,9 € botella
El que más me gustó.  Es un coupage de las variedades de uva Cabernet Sauvignon 40%, Shiraz 40% y Merlot 20%.  Con permanencia en barricas de roble nuevas durante 12 meses. Tiene un color rojo picota con reflejos dorados de crianza. Tiene aromas a chocolate negro, torrefacto y fruta madura. En boca es de trago largo agradable y fresco.

En definitiva es Casa del Valle en Yepes es una bodega ideal para visitar, realizar enoturismo al alcance de la mano y más aún si vives en Madrid.

El Grupo Musa y el chef Javier Brichetto han presentado su oferta gastronómica con un concepto de tapa japonesa en el nuevo Mercado de San Agustín en Toledo.

El restaurante se llama Musakaya y mezcla cocina tradicional española con la cocina japonesa creando así una fusión de sabores. Utilizan ingredientes de alta calidad en sus elaboraciones.

Por lo que os recomendamos en vuestra visita a la bonita ciudad de Toledo hagáis una parada en su Mercado gastronómico y probéis la oferta gastronómica del que disponen seguro que regresáis contentos después de visitar la ciudad.

Los próximos días 4 y 11 de octubre las Bodegas Dionisos de Valdepeñas van a celebrar las " Jornadas de vendimia, elaboración de vino y cata" para dar a conocer cómo se elabora el vino ecológico que sigue el legado del firmamento.

Tiene una bonita bodega antigua manchega y tinajas de barro con los que antiguamente se elaboraban el vino. Os recomendamos la visita corta de la bodega.

Esta bodega tiene vinos tintos y también blancos con varias medallas y premios.

Si te apetece puedes ver otra forma de elaborar vinos como antiguamente guiándose por las estrellas y los ciclos de las estaciones además se encuentra cerca de Madrid.

Hace poco nos pedimos una botella de este vino en un restaurante de Madrid. La verdad es que nos dejamos llevar por el diseño de su etiqueta. Luego descubrimos que era de las Bodegas Marqués de Riscal y que de seguro habíamos acertado en la elección

El vino de Finca Torrea 2007 de la DO La Rioja es un coupage de las uvas Tempranillo y Graciano, procedentes del viñedo que rodea la finca que lleva su nombre.

Es un vino moderno, con aromas y sabor afrutado con crianzas más cortas en roble francés de 18 meses por lo que no es tan balsámico además tiene un periodo más corto de crianza en botella. Tiene una graduación de 14º C

Nota de Cata: Tiene un bonito color cereza con aromas intensos a frutas negras, especias y toque tostado. En boca buena estructura, potente y largo paso con final fresco.

 Ideal para acompañar a carnes asadas, pollo asado de corral y tataki de atún rojo. También recomendable para comida asiática.

 Tiene un precio que ronda los 20 € por botella.

Una tarta o timbal de melocotón fácil de preparar, yo la hice con la peque de la casa y además de que la tuve entretenida salió muy rica.

Ingredientes:

400 gr de harina
1 yema de huevo
1 sobre de levadura en polvo
2/4 de vaso de aceite de oliva virgen extra
una pizca de sal
1/4 de vaso de agua fría
4 melocotones
1 cucharada de postre de canela en polvo
2 cucharadas de postre de azúcar
1 y 1/2 vaso de chupito de licor de anís.

Elaboración:

Pelamos los melocotones y cortamos en trozos pequeños, a continuación los metemos en un cazo con el azúcar, la canela y el anís y dejamos infusionar durante unos minutos a fuego medio.

Mientras mezclamos la harina con la levadura, disponer en una superficie lisa y hacer un volcán. Añadimos en el hueco de harina la yema de huevo y vamos mezclando, a continuación poco a poco vamos vertiendo encima del volcán de harina el aceite de oliva virgen extra y mezclamos bien, también poco a poco y sin parar de mezclar con las manos agregamos el agua según necesidad de la masa. Una vez que veamos que tiene consistencia y que no se queda pegada a la superficie de la mesa estará lista.

Precalentamos el horno a 170ºC

Cortamos en dos mitades la masa, extendemos una de ellas en el recipiente del horno en donde vamos a cocer la tarta. Una vez extendida disponemos sobre ella, los trozos de melocotón uniformemente. Dejamos apartado el líquido sobrante de la coción para su utilización posterior

Ahora con ayuda de un rodillo extendemos la otra mitad y la disponemos encima del melocotón, cerramos y unimos los trozos de masa para dejar lista nuestra tarta.

Hacemos con ayuda de un tenedor algunos agujeros en la masa para que respire en la cocción y pintamos la masa con el líquido resultante de la cocción de los melocotones.

Introducimos en el horno nuestra tarta durante 30 minutos y lista para tomar.

Esta es una receta de mi abuela Teresa madrileña pero vivió muchos años en Málaga.

Ingredientes:
200 gr de harina
50 gr de mantequilla
2  cucharaditas de levadura en polvo
1/8 vaso de leche fría
1  huevo
una pixca de sal fina
1 kilo de mandarinas, reservamos algunos gajos para decorar por encima
40 gr de azúcar
1/4 vaso de kirsch o licor de cerezas
almendras picadas para decorar
azúcar glas para decorar
1 corteza de limón
nata montada para decorar

Elaboración:

Pelamos las mandarinas y reservamos varios gajos para decorar la tarta toda por encima. Las demás las ponemos en un cazo a calentar con el licor de cerezas.
Mientras, ponemos en una cacerola la mantequilla a derretir, añadimos huevo, azúcar, corteza de limón y la leche fría removemos bien a fuego lento. Una vez todo bien mezclado agregamos  la harina y la levadura.

Preparamos un molde liso de tarta redonda, untamos con mantequilla y espolvoreamos con harina para que no se pegue.

Ahora sacamos los gajos de mandarina del cazo con el licor y agregamos a la mezcla de masa. Mezclamos bien y vertemos en el molde.

Ha de cocer unos 30 a 45 minutos en el horno precalentado a 180ºC.

Después de cocida la tarta de mandarina dejamos que se temple para desmoldar. Una vez desmoldada  por los laterales ponemos un poco de nata montada y a continuación espolvoreamos bien con almendra picada.
Colocamos los gajos de mandarina que teníamos reservados para decorar y una vez colocados todos espolvoreamos con azúcar glas por encima.

Lista para tomar cuanto más fría esté mejor por lo que puedes dejar unos 15 minutos en la nevera antes de incarle el diente.

El restaurante mexicano La Venganza de Malinche se encuentra en pleno centro de Madrid, en la calle jardines 5 pero también tiene otro local muy cerca de allí en la calle hortaleza 4.

Tenía muchas ganas de ir porque me lo habían recomendado varios amigos mexicanos que tengo. Y si un compatriota lo recomienda es que se tiene que comer bien y un rincón de México en Madrid.

Sobre todo me recomendaron los tacos, que si vas los miércoles a partir de las 19h te costarán un euro.

Así que mí amigo Sergio y yo no nos lo pensamos dos veces y reservamos una mesa a medio día.

El local es muy amplio y genial decorado. Aunque un poco oscuro para mi gusto.

Todos los platos son sin picante, algo que le quita la gracia para los amantes del picante como nosotros, pero algo necesario para los demás "mortales". Pero no te decepciones porque te ponen la salsa picante a parte por lo que le puedes dar el toque que tu quieres de picante.

Pastel Azteca

Los camareros son eficaces y atienden rápido. Nosotros nos dejamos recomendar por ellos y nos pedimos para comenzar dos margaritas uno de mango y otro de fresa.

En cuanto a los platos nos pedimos: el pastel azteca que son nachos rellenos con carne y por encima guacamole y queso que estaba delicioso y me quede con las ganas de más porque me resulto algo pequeño para compartir.

Pero eso no importó porque se me llenó la panza con el siguiente plato de queso fundido. Se deshacía en la boca y súper sabroso.

Después para rebajar nos pedidos una sopa que nos asentó el estómago y nos vino muy bien, estaba deliciosa.

Y dejo hueco para la tortilla rellena de dulce de leche.

El precio por persona ronda los 20 a 24 € aunque también disponen de un menú diario de 11 €.

En definitiva un restaurante  mexicano recomendable y para repetir.